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Desinfección de virus

Kill and Clean Services ofrece el servicio de desinfección de instalaciones mediante técnicas de pulverización y nebulización con desinfectantes de amplio espectro, para prevenir la propagación de bacterias y virus, como el de la gripe.
Para el caso del coronavirus nuestros servicios complementan muy bién las acciones recomendadas por los organismos de salud competentes destinados a evitar el contagio y la propagación de este flagelo.

Nebulización, la mejor técnica de desinfección para grandes superficies:

Kill and Clean Services desinfecta todo tipo de instalaciones aplicando un desinfectante de amplio espectro actuando por contacto directo y nebulización, accediendo a todas las superficies y zonas de difícil acceso.

Gracias a nuestro conocimiento del servicio, y al método de aplicación por nebulización, nos permite tratar grandes superficies en cortos períodos de tiempo, logrando la máxima efectividad y el mínimo tiempo de inactividad para el negocio.

Desinfección y sanidad ambiental

Todos sabemos que una buena y eficaz forma de evitar infecciones y enfermedades por agentes tales como virus, bacterias o incluso hongos es la desinfección.

La desinfección se define como la erradicación de microorganismos vivos que producen las enfermedades llamados agentes patógenos que son los que provocan la infección. Para luchar contra estos elementos nocivos para la salud usamos desinfectantes solubles en el agua que ayudan a impedir el crecimiento de colonias de virus y bacterias nocivos para la salud.

Como medida para luchar contra la infestación es fundamental encontrar cuál es el foco de contaminación, para poder así utilizar los métodos necesarios para eliminarlo y evitar su reproducción: La desinfección debe hacerse siempre garantizando vuestra seguridad, a través del servicio que solo puede prestarle una empresa profesional como la nuestra.

Dentro de los métodos físicos encontramos tres: la ebullición, la pasteurización y el planchado.

La pasteurización es un proceso que reduce la proliferación de microbios de los alimentos mediante la aplicación de calor, aunque no es aquí donde mueren las bacterias en su totalidad. En el caso de la leche, su pasteurización se realiza elevando la temperatura durante 15 segundos hasta los 71 grados para luego enfriarla rápidamente.

Para la ebullición sumergimos un objeto en agua hirviendo durante 10 minutos. Con ella, la desinfección es más intensa.

Si hablamos de los productos desinfectantes, podemos decir que su uso es principalmente en objetos inertes, como suelos, techos y superficies. El inconveniente principal de estos es que muchos de estos productos pueden neutralizarse por materiales orgánicos o incluso por la luz, por lo que las concentraciones microbicidas no duran lo suficiente.

Un buen desinfectante tiene que reunir las siguientes características, además de ser capaz de eliminar la mayor cantidad posible de agentes patógenos:

  • Tiene que poderse disolver en agua o en alcohol
  • Debe tener poco nivel de corrosión o toxicidad para los tejidos
  • Debe tener un olor agradable o neutro preferiblemente, y además tiene que ser incoloro.

Para evitar daños para nuestra salud se recomienda acudir solo a profesionales que trabajen bajo estrictos protocolos de seguridad y calidad adaptados a vuestra necesidad, que garanticen una desinfección plena que reduzca los riesgos de infecciones, y enfermedades para vosotros o para vuestras mascotas.